Cumbre Mundial de Educación: transformando los sistemas educativos en 90 países y territorios
Actualmente resulta crucial que la comunidad internacional actúe por la educación.
La pandemia de COVID-19 ha exacerbado la «crisis del aprendizaje» que ya azotaba a muchas regiones del mundo. El cierre de escuelas durante la crisis sanitaria ha causado una ruptura educativa notable: dos de cada tres países en desarrollo han reducido el presupuesto de educación, más de 100 millones de niños podrían sufrir un retraso en el aprendizaje y unos 20 millones de niñas podrían no volver nunca a la escuela.
Financiación de proyectos en pro de una educación de calidad
Francia participará en la 4.ª conferencia de reposición de la Alianza Mundial para la Educación (AME), que se celebrará en Londres los días 28 y 29 de julio de 2021. La conferencia la organizan conjuntamente el primer ministro británico, Boris Johnson, y el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta. El objetivo es recaudar 5000 millones de dólares en promesas de contribución para financiar proyectos que fomenten una educación de calidad en unos 90 países en vías de desarrollo durante los próximos cinco años (2021-2025).
Esta meta ambiciosa que se ha marcado la Alianza Mundial para la Educación debería posibilitar la escolarización de 88 millones de niños más y mejorar las condiciones y resultados en el aprendizaje de 175 millones de niños y niñas.
¿Qué es la Alianza Mundial para la Educación?
La Alianza Mundial para la Educación, o Global Partnership for Education (GPE) en inglés, es un fondo multilateral para financiar la educación en cerca de 90 países en vías de desarrollo. Fue creado en 2002 y su sede está en el Banco Mundial en Washington. Desde 2019, cuenta con una oficina regional en París.
Francia es miembro de la Alianza desde su creación y un proveedor de fondos histórico. La aportación francesa representó casi el 10 % de los fondos obtenidos para el ciclo 2018-2020.
A día de hoy, Francia ha destinado a la Alianza cerca de 347 millones de dólares. En su histórica renovación del compromiso de la conferencia de Dakar del 2 de febrero de 2018, Francia asignó la mitad (100 millones de euros) de su aportación a los países del Sahel.
Entre 2002 y 2020, los países del G5 Sahel recibieron 685 millones de dólares de la Alianza Mundial para la Educación (el 10 % de la financiación), mientras que los 19 países en vías de desarrollo prioritarios de la cooperación francesa recibieron cerca del 40 % de la financiación de la AME.
La Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) es una de las diez agencias u organizaciones internacionales asociadas a las que la AME encomienda la utilización de sus fondos. Desempeña ese papel en cinco países: Burkina Faso, Burundi, Guinea, Níger y Senegal.