El movimiento One Planet

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El movimiento One Planet se creó para que la lucha contra el cambio climático y la protección de la naturaleza siguieran presentes al nivel político más elevado. Se lanzó en diciembre de 2017 a iniciativa de Francia, la ONU y el Banco Mundial, a partir de una realidad clara: proteger el planeta exige un mayor compromiso, un mayor número de decisiones concretas y una movilización conjunta de todos los actores de la vida pública y del mundo económico. El movimiento se enmarca en una dinámica internacional que se percibe poniéndolo en perspectiva con las otras grandes citas internacionales.

Reunir a todos los actores de la vida pública y política

Desde 2017, la cumbre permite reunir a muchas personas responsables de tomar decisiones de todos los ámbitos para que identifiquen y aceleren iniciativas de transformación y la financiación de soluciones beneficiosas para el clima, la biodiversidad y los océanos.

Las cumbres One Planet no son cumbres estatales. Al reunir a todos los actores, permiten que todos, ya sean Estados o representantes de la sociedad civil, se expresen de forma equitativa. Complementan por tanto las Conferencias de las Partes (COP), que congregan a los actores estatales.

Favorecer y financiar soluciones concretas

El primer objetivo del movimiento One Planet consiste en favorecer la emergencia de soluciones concretas en aras de la transición hacia una economía baja en carbono, la adaptación al cambio climático y la conservación de la biodiversidad.
El movimiento, buscando nuevas fuentes de financiación y asociaciones innovadoras, permite garantizar que las negociaciones internacionales relativas al clima se traduzcan en realidades y propone soluciones concretas para mitigar los efectos del cambio climático y proteger las especies animales y vegetales. Por tanto, también contribuye a que el sector financiero recobre «sentido», reconectándolo con proyectos de transformación que son útiles para los ciudadanos en el marco de la acción por el clima.

Con el fenómeno One Planet, unas treinta coaliciones e iniciativas concretas han visto la luz o han pasado a estar operativas. Las organizaciones que las llevan a cabo se han comprometido a alcanzar objetivos concretos y a rendir cuentas.